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¿Sabes cómo Proteger tu Piel del Sol?

cremas solares y gafas de sol

¡Hola! soy Marga, de cosmética. Hoy quería comentaros que, como ya ha llegado el calor, seguro que estáis deseando broncearos y poneros al sol como las lagartijas…pero exponernos al sol de una forma inadecuada puede provocar además de insolaciones, quemaduras, afecciones oculares, envejecimiento prematuro de la piel, manchas e incluso cáncer de piel.

Antes de tomar el sol ten en cuenta que…

 Aparte de gafas de sol, gorras, por su puesto la propia ropa, nuestros grandes aliados para evitar los efectos adversos del sol  son los fotoprotectores. Además, en la nutricosmética, tal y como os explicó Fátima el otro día, encontraremos complementos que nos ayudaran a preparar nuestra piel antes de la exposición al sol propia de los meses de verano. 

Mi recomendación es que empecéis a tomar un complemento oral un mes antes de que vayáis a comenzar una exposición más continua. Así tendréis la piel preparada desde el interior, reduciréis las probabilidades de quemaros y conseguiréis un bronceado más intenso y duradero.

Comprendiendo el SPF y Otros Términos Relacionados

El Factor de Protección Solar (SPF) es una medida que indica el nivel de protección que un protector solar ofrece contra los rayos UVB, responsables de las quemaduras solares y daño cutáneo superficial. Un SPF más alto significa mayor protección, pero es crucial entender que ningún SPF ofrece protección total. Por ejemplo, un SPF 30 bloquea aproximadamente el 97% de los rayos UVB, mientras que un SPF 50 bloquea cerca del 98%.

Además del SPF, es importante familiarizarse con otros términos:

  • UVA y UVB: Los rayos UVA penetran más profundamente en la piel y están asociados con el envejecimiento prematuro. Los UVB afectan la capa superficial de la piel y son los principales causantes de quemaduras solares.
  • Resistente al Agua: Los protectores solares pueden ser resistentes al agua, pero no completamente impermeables. La etiqueta debe indicar si el producto mantiene su SPF después de 40 o 80 minutos de actividad acuática.

Elegir un protector solar adecuado implica considerar estos factores y optar por productos de “amplio espectro”, que ofrecen protección tanto contra UVA como UVB.

¿Cómo elegir el fotoprotector adecuado?

La industria cosmética utiliza diferentes metodologías para determinar el índice de protección de los productos solares, dependiendo del país de procedencia de los mismos. En Europa, el método utilizado se denomina COLIPA y es el más emplado actualmente.

Existen dos tipos de radiaciones ultravioleta que llegan a la superficie de la piel, las UVB,  que penetran poco en la piel y son responsables del eritema o enrojecimiento, y las UVA  que penetran más profundamente en la piel y juegan un papel crucial en la pigmentación, las alergias…y a largo plazo en el fotoenvejecimiento de la piel.

Entonces ¿qué tipo de fotoprotector uso?

  • Lo primero que tenemos que tener en cuenta es a quién vamos a aplicárselo, ya sean niños o adultos. Recordad que no es aconsejable exponer directamente a la luz solar a los niños menores de 3 años. Además, deben utilizar siempre ropa, gafas de sol, gorra y un factor de protección 50+ especial para niños y resistente al agua, como la Leche de Protección Extrema de Avène. Aplicad el fotoprotector incluso en la sombra y en actividades al aire libre y hacedles beber agua con frecuencia para evitar la deshidratación.  Este cuidado especial que debemos tener con las pequeños se debe a que la piel “recuerda” y acumula todos los daños que va padeciendo a lo largo de los años. Por eso es importante cuidarla desde lo antes posible.
  • Lo segundo a tener en cuenta es cuál es el fototipo de la persona que lo va a usar. Aquí os dejo una tabla que he hecho para que podáis orientaros. Yo suelo aconsejar Factor de Protección Solar (FPS o SPF en inglés) 50+ para las personas con fototipos I y II, de 30 a 50+ para los fototipos III y IV, de 20 a 50+ para los fototipos V y protección de 20 a 30 para el fototipo VI.
  • También es importante la zona del cuerpo en la que vamos a aplicar el fotoprotector (rostro, escote, labios, cuerpo..). Existen zonas más delicadas, como la cara, el escote o las ingles que precisan un nivel de protección mayor o productos más adaptados a sus características como el Stick Labial de Anthelios de Protección Extrema y el Stickpara Zonas Sensibles de la misma marca. Además, podemos necesitar una crema especial para el rostro para pieles grasas y una crema corporal para pieles secas, al mismo tiempo.

En relación a lo anterior, debemos tener en cuenta nuestro tipo de piel: norma, seca, grasa, atópica…etc. No hay nada más molesto que tener la piel grasa y tener que aplicarte una crema untuosa que provoca brillos y aparición de acné en la cara.  Respecto a esto, hoy en día contamos con fotoprotectores de todo tipo como Photoderm Bronz SPF 30 para Pieles Sensibles, que además de protegerte estimula el bronceado o el fotoprotector de Avène Cleanance Solar SPF 30 especial para la pieles con tendencia acneica.

Para mí, los que nunca faltan en mi bolso de la playa son Heliocare Gel Protección Extrema 50 ml e ISDIN Fusion Fluid SPF 50+ para el rostro e ISDIN Fotoprotector Transparent Spray 50+ para el cuerpo. El primero me gusta por su olor y su textura de gel fundente que evita los restos blanquecinos de algunas cremas. El segundo me encanta porque es muy completo; además de ofrecerte una muy alta protección es una hidratante y antiarrugas muy buena. Y el corporal me gusta porque es un aceite seco y da sensación de frescor y no deja ese aspecto pringoso de muchos aceites. Además, puedes colocar el difusor hacia donde quieras, que siempre rociará el aceite, lo que te permitirá llegar zonas difíciles del cuerpo. 

¿Cómo aplicar el fotoprotector?

  • Aplica el fotoprotector sobre la piel seca de manera generosa media hora antes de la exposición solar.
  • Repite la aplicación cada 2 horas y después del baño. Aunque el fotoprotector que estemos usando indique resistente al agua, es recomendable repetir la aplicación después de un baño prolongado (más de 20 minutos.
  • Evita la exposición solar entre las 12h. y las 16h.
  • Utiliza fotoprotector incluso en los días nublados.
  • También recomiendo utilizar un fotoprotector más alto en las primeras exposiciones solares.

Cuidados Posteriores a la Exposición Solar

Después de la exposición al sol, es fundamental cuidar la piel para reparar y rehidratarla. Aquí algunos consejos esenciales:

  • Hidratación: La exposición al sol puede deshidratar la piel. Beber mucha agua y aplicar lociones o cremas hidratantes ayuda a reestablecer la humedad natural de la piel.
  • Aloe Vera: Conocido por sus propiedades calmantes y curativas, el gel de aloe vera es excelente para aliviar la piel irritada o quemada por el sol.
  • Baños Fríos o Templados: Ayudan a calmar la piel después de la exposición solar. Evita baños calientes que pueden incrementar la irritación.
  • Productos Calmantes: Busca productos con ingredientes como la caléndula, camomila o té verde, que pueden ayudar a calmar la piel inflamada o irritada.

Estos cuidados no solo ayudan a aliviar los efectos inmediatos del sol sino que también contribuyen a mantener la piel sana y prevenir el daño a largo plazo. Recuerda, si experimentas quemaduras solares severas, ampollas o síntomas de insolación, es importante buscar atención médica.

Mitos sobre el sol

  1. Si está nublado no te quemarás. Los días nublados pueden terminar siendo los más peligrosos puesto que esta creencia hace que nos confiemos y no utilicemos la debida protección. Sin embargo, “tal y como recordaba en una reciente campaña el Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña (COFC), el 90% de la radiación proveniente del sol consigue atravesar las nubes”.
  2. Es bueno ‘preparar’ la piel con sesiones de rayos UVA.  “La luz artificial emite una intensidad de radiación ultravioleta mucho mayor a la que emite la solar”. Un estudio publicado en The Lancet Oncology afirmaba que el riesgo de cáncer aumentaba hasta un 75% si los rayos habían sido tomados por menores de 30 años.
  3. Con una protección total te puedes relajar durante todo el día. Los dermatólogos son tajantes en este punto: la crema solar se debe aplicar 20 o 30 minutos antes de la exposición solar y ha de renovarse cada dos horas. Se debería aplicar incluso con más frecuencia si se trata de una crema ligera o crema en spray.
  4. Si tienes la piel oscura también necesitas protección solar.  Un estudio de la Universidad de Cincinnati de 2006 aseguraba que las personas de piel oscura pueden sufrir de forma más grave el cáncer de piel, debido a que se
    detecta en fases más avanzadas y se presenta de forma más agresiva. La radiación solar continúa dañando las células aunque no se produzca una quemadura evidente.
  5. Con aceite te pondrás más moreno en menos tiempo. Hay quien ha usado aceite y quien ha usado Coca Cola, betadine o incluso cerveza… Lo cierto es que usar cualquier acelerador o intensificador del bronceado sin protección es hoy en día una auténtica locura.

Recuerda que para lucir un bronceado saludable y perfecto es fundamental que siempre uses protección. Si tienes dudas respecto al factor que debes utilizar según tu tipo de piel, no dudes en pedirnos consejo en nuestra farmacia.

Bueno, después de todas estas recomendaciones… ¡estamos preparad@s para disfrutar del verano! Si aún tienes dudas, pasa por la farmacia y déjate asesorar. Hay solares para todos los gustos y necesidades, con texturas cada vez más agradables y fragancias…uhmmm…¡que al olerlas hacen que te sientas de vacaciones!

Además, en Farmacia Santamaría te ofrecemos la posibilidad de un análisis facial y capilar gratuito y personalizado con la ayuda de una microcámara, así que podremos ver con exactitud  el estado de tu piel, en cuanto a su hidratación, pigmentación, firmeza…y podremos recomendarte el producto que mejor se adecúa a tus características.

Marga